El pasado jueves 19 de septiembre, a las 11:00 a. m., la Universidad Madero (UMAD) llevó a cabo un simulacro de evacuación como parte de sus protocolos de seguridad, demostrando su compromiso con la seguridad y el bienestar de toda su comunidad universitaria. Este ejercicio no solo incluyó un simulacro de sismo, sino que también se abordaron protocolos específicos sobre cómo actuar en caso de una erupción volcánica o la amenaza de una bomba.
A las 11:00 a. m. en punto, la alarma de sismo sonó en todas las instalaciones de la UMAD. De inmediato, estudiantes, profesores y personal administrativo comenzaron a evacuar los edificios, siguiendo las rutas de evacuación previamente establecidas y dirigidas por el equipo de brigadistas de la universidad. El simulacro transcurrió de manera ordenada, con los participantes demostrando un conocimiento claro de los procedimientos a seguir, desde la protección personal hasta la evacuación hacia los puntos de reunión seguros.
El simulacro también incluyó una demostración del protocolo a seguir en caso de una erupción volcánica, un tema de especial relevancia dada la cercanía de la UMAD con el volcán Popocatépetl. Los estudiantes y personal fueron instruidos sobre las medidas a tomar, como el uso de mascarillas para protegerse de la ceniza volcánica, la importancia de cerrar ventanas y puertas para evitar la entrada de material volcánico, y cómo permanecer en lugares cerrados hasta que las autoridades indiquen que es seguro salir.
Posteriormente, se activó una alarma específica para el caso de una amenaza de bomba, donde se simuló una evacuación ordenada y rápida, destacando la importancia de mantener la calma y seguir las instrucciones de seguridad en todo momento.
Al finalizar el simulacro, el vicerrector de la UMAD, dirigió una breve plática a los participantes en el punto de reunión principal. En su mensaje, destacó la importancia de estar preparados para cualquier tipo de emergencia, y explicó detalladamente los protocolos que la universidad tiene implementados para situaciones de sismos, erupciones volcánicas y amenazas de bomba.
“El objetivo de estos simulacros es garantizar que todos sepan cómo actuar en una situación real.” “La prevención y la preparación son nuestras mejores herramientas para protegernos ante cualquier emergencia”, subrayó el vicerrector.
Asimismo, hizo hincapié en la necesidad de tomar en serio cada simulacro, ya que estos ejercicios permiten a la comunidad universitaria familiarizarse con los procedimientos y actuar con eficacia y calma en situaciones críticas.
El simulacro realizado en la UMAD el 19 de septiembre fue un ejercicio exitoso que reafirmó el compromiso de la universidad con la seguridad de su comunidad. La participación activa y ordenada de estudiantes, profesores y personal administrativo demostró un alto nivel de conciencia y preparación ante posibles emergencias. La instrucción brindada por el vicerrector fortaleció el conocimiento de los protocolos específicos para distintas situaciones, recordando a todos que estar preparados es clave para minimizar riesgos y salvar vidas.
Este tipo de actividades subraya la importancia de la prevención y la educación en temas de seguridad, convirtiendo a la UMAD en un espacio más seguro para toda su comunidad.
